Hoy queremos haceros llegar un pequeño recordatorio de la inolvidable tormenta del 16 de julio de 1980, conocida como la nube del Carmen.
En la tarde del 16 de Julio de 1980 en Cieza se hizo la oscuridad es una imagen que nunca se puede olvidar.
Comienzan a verse inmensidad de rayos acompañados de sus correspondientes truenos que verdaderamente parecían cañonazos en una guerra, del cielo a la vez caen piedras de gran tamaño como huevos de gallina podríamos decir, estremecedor el sonido de este granizo al tocar las superficies (calles, coches, edificios).
Fueron 15 minutos aproximadamente en los que parecía que a Cieza llegaba el tan oído fin del mundo, las calles blancas, los coches destrozados, así como las persianas y muchos tejados de las viviendas.
Muchos ciezanos recordarán el pánico vivido por todos los que esa tarde estábamos en la ciudad, el llanto de los niños y niñas la expresión incrédula de adultos de ver tal tormenta, más bien podríamos creer que estábamos viviendo en una película esos minutos.
Después del paso de la tormenta todo era preguntarse y decirse, ¿Qué ha pasado?, que desastre ¿de verdad no ha sido un sueño? mi casa está con las persianas destrozadas, mi tejado se hunde.
En zonas de huerta, toda la fruta en plena recolección entonces desaparecía de sus árboles cayendo al suelo irreconocibles a la vez que estos de la intensidad de la tormenta estaban totalmente destrozados.
Fueron pérdidas incalculables y daños que dando un paseo por Cieza todavía se pueden apreciar en algunas edificaciones existentes en aquel año.
